-No entiendo porqué vamos a ofender a Lope con este asunto- protesta Amelia, mientras el grupo se dirige a la casa del Fénix de los Ingenios-. El Quijote de Avellaneda, prejuicios aparte, no es una mala novela. Es una obra correcta para su época pero no es una obra maestra. En sus páginas se ve el buen hacer de un artesano, no la genialidad de un revolucionario como Lope de Vega.
-Que nos lo explique él.- se limita a decir Alonso, agarrando con fuerza la empuñadura de su espada envainada.
-Tú misma dijiste que el Quijote de Avellaneda es una apología de la obra de Lope.- recuerda Julián. Amelia se siente acosada por sus compañeros.
-Porque Lope era un genio- se defiende-. Tuvo tanta repercusión en su momento que había muchos autores que eran más lopistas que Lope.
Julián suspira.
-No hay nadie más lopista que Lope.
En pocos momentos Amelia ha estado tan a punto de perder la compostura.
-Si tan egocéntrico es, ¿por qué no firmó la obra?
-Quizá por una emoción más intensa que la vanidad- conjetura Julián-, el odio. Tú dijiste que Lope y Cervantes se odiaban.
-Si hay algo que un español hace bien es odiar a otro español.- se lamenta Alonso. Julián asiente.
-Eso e inventar poniendo palos a las cosas.
-Pero insisto que…
El tono de Julián es repentinamente conciliador.
-Amelia, cualquiera que no nos conociera tendría la impresión de que yo quiero ver a Lope y tú no- ella no asiente, pero guarda silencio-. Hablaremos con él, despejaremos dudas de su implicación en este asunto y tan amigos.
La líder del grupo piensa un momento.
-De acuerdo, pero yo hablaré con él. No quiero que expongamos demasiado a Lope de Vega.
Sus compañeros aceptan a regañadientes. El grupo llega a la casa de Lope en la calle del Marquesado, una casa grande y bien construida en un barrio tranquilo y acomodado.
-Julián y yo podríamos entrar en la casa por detrás y buscar alguna pista mientras vos habláis con él.- propone Alonso, poco satisfecho con la idea de quedarse con los brazos cruzados.
-¡¿Pero qué os ha dado con Lope?!
-Es sólo una idea.- se disculpa el soldado.