-Mi marido es un gran experto en arte- dice Amelia, agarrando del brazo a Julián, que asiente dejándose llevar-. Me decía que esta iglesia es claramente gótica

-Edificada en el Renacimiento, de estilo gótico, es correcto.

-También me indicaba mi esposo que la fachada presenta características del barroco.

-Barrocas, ciertamente- el cura le ofrece a Julián un gesto aprobatorio-. Se ve que es usted un experto en arquitectura.

-En efecto, en efecto- se deja querer Julián. Da unas palmaditas cariñosas en la mano a su “esposa”-. Si no he dicho alguna otra cosa que quieras comentar, querida, deberíamos volver a nuestros asuntos.

Amelia Folch exagera una sonrisa bobalicona.

-Mujeres- niega con la cabeza el cura, indulgente-. Siempre tan dispuestas a parlotear.

-Seguro que es usted un gran experto- intenta reprimir el insulto Julián-. Si nos disculpa, es hora de que nos vayamos